domingo

Hablar desde VI

Hablar desde el espacio

de encontrarse

y refundarlo.

 

“Segundo caso: Liberación paulatina.”

Hablar desde V

Hablar desde un raro brillo

que se relame en su opulencia,

que aparece en la noche

como una especie de monstruo.

 

Algo así como una luz,

un foco amarillo colgando

de un cable alimentando

un fondo lleno de humedad.

 

Una iluminación de domingo,

una terraza vacía,

una película doblada repetida

en blanco y negro mientras el domingo se calla,

en este lunes que ya es martes.

 

Es un recuerdo,

la sensación del recuerdo,

la asociación del silencio

y la visión de lo interno.

Hablar desde IV

Hablar desde lo descompuesto

ponerse en acción,

poner la mente y el corazón

en el lugar entero.

 

Hablar con el aire,

enviar las señales a un hombro,

a un asombro, y a personas leales, reales,

que en sus torbellinos,

frenan el espacio-tiempo.

 

Hablar desde las vísceras

sin miedo, sin sol, sin luna,

sin amo, Dios ni patrón.

 

Desde lo descompuesto,

mirarlo, mirarse, volver.

Y si estoy enloqueciendo

mis amigos ya son parte.

Hablar desde III

Hablar desde el dolor,

de la resistencia de cartón,

del esqueleto de madera,

desde el recuerdo del sufrir.

 

Hablar pensando en energía

en la potencialidad de lo intrínseco,

en ese poder gestado,

como una flor que se resiste

a terminar la primavera.

 

Debe ser la distancia

que me atraganta, que tropieza,

que no es clara en momentos.

 

Debe ser la ansiedad,

la luna, la música, la almohada,

que no sabe y escucha los pensamientos.

 

Hablar desde la mesa vacía

y el recuerdo de los sueños.

Hablar desde II

Hablar desde el color,

un rosa en el cielo,

un rosa de lo antiguo,

un color barrial,

como estampita de un santo inventado,

como el olor a la salsa de mi madre,

como el recuerdo de la radio

y mis manos en compañía

de algún quehacer.

 

Hablar desde el color,

hablar desde el olor,

hablar pensando en rosa,

en la calma del atardecer,

en la profundidad de la calma,

es hablar del recuerdo

en la convivencia esencial.

Hablar desde I

Hablar desde la confusión

es hablar eclipsado,

es emprender un sendero

donde el cuarto se inunda,

y no se sabe si está lloviendo

afuera de esta noche.

 

Debe ser la luz del misterio

que erige un monumento,

un movimiento andante

donde el avance no tiene freno

ni el sentido hacer silencio.

 

Debe ser la soledad

del cielo en su saciedad

o su hambre de la nada,

ese encuentro del tiempo

en el que arden las ganas

de comer en la mitad de la noche.

Dinamitar

Quisiera encender la mecha

para dinamitar los dolores

y encontrar los vestigios,

así contarles un cuento

del como crecieron

para finalmente ser olvidados.

 

Quisiera encender la llaga,

así la cicatriz se arma,

y dejar de gastar saliva

en todo lo que fue

y no quiero que sea.

 

Quisiera que sepas

que dinamitar es bueno,

y que a veces destruyendo

se construye un cielo.

Ardiente

Vos sos el sol

que se cae y se levanta

que pasa por todos los estados,

y salta entre médanos

del cobre a la densa materia,

de la ceniza a la lava

ardiente,

sobresaliente oro.

 

Vos sos el sol que sale,

que a la noche medita,

y que en su núcleo

invoca toda la creación,

y al salir por la marea

exhala la energía entera

del universo.

jueves

La luz II

La luz

que emanan esos ojos

es la luz que grita

que ya no dormita,

es la puerta que acelera

la entrada, el pasillo, la casa,

la calle, la vereda.

 

La luz

que esos ojos emanan

es la luz de la caricia,

es la llave del encuentro,

la cama, la almohada,

la sábana, la frazada,

tu cuerpo y el mío,

el techo y el silencio.

Hoy II

Hoy,

ha soñado el pasado,

con un sonido similar,

a cuando cae un guante.

 

Hoy apareció,

un fuego extinto,

en una chispa crispada,

con ganas de encender

un bosque fresco.

 

Hoy queda atrás,

todo aquello que abrió

una herida, un puñal,

que se regocija

en el auto-convencimiento total,

de ser Dios, la patria y el amo o el amante.

 

La sorpresa

La sorpresa

es que quería sorprender,

y el gusto

deja algo desabrido,

mientras nuestra saliva

recuerda aquella partida,

el núcleo de su alma,

que ya dejo una sombra.

 

A veces pasa la noche,

a veces pasa la mañana,

mientras nuestra saliva

recuerdo,

todo lo que no importa,

todo lo que poco importa,

recuerdo ese dicho

“aquel que se va sin que lo echen,

vuelve sin que lo llamen”

Timer

Es hora

de que la noche caiga

y entre rodeos

silencie el techo,

y el silencio abrumador

de lo estático.

 

Es hora de que caiga

la hora que hace rodar,

y pone el filme en marcha

que sorprende y a veces espanta.

 

Es hora de que mis tripas

y la tele del vecino

que retumba en mi baño,

encuentren el timer

y se armen de silencio.

 

viernes

Para sembrar

Para sembrar,

para alcanzar a crecer,

no solo hay que ser,

no siempre hay que ser,

no siempre hay que ser,

hay que comprender la existencia,

hay que comprender todo,

la posible existencia de algo,

de la otredad.

 

Hay que comprender la existencia

y sentir lo inasible,

lo inabarcable,

cómo gravita, cómo invade,

y cómo a veces es inexistente sembrar,

alcanzar a crecer,

para sembrar.

Para crecer

Para crecer,

para alcanzar a ser,

no hay que sembrar,

no siempre hay que sembrar,

no hay que cortar un árbol,

hay que talar un bosque

y ver la tierra quemada.

 

Para saber,

dónde no hay que plantar,

hay que talar un bosque

y oler la fragilidad,

cómo suena y cómo arde,

y cómo a veces es una molestia crecer,

alcanzar a ser,

para crecer.

Un rincón

Un rincón del espacio,

un rincón del aire,

un rincón donde divide,

el sol y la luna

y desde donde llega

la información ilimitada.

 

Ese lugar donde se materializa,

ese lugar donde es materia,

ese lugar de los elementos,

donde la unión,

donde la arista de aquello interno y externo se expande.

La perspectiva y ese punto donde se absorbe la luz,

la materia y el espacio.

Bajo II

Bajo esta noche que vibra,

pero no habla ni enuncia.

 

Bajo esta noche que zumba,

pero no emite señales codificadas.

 

Bajo esta noche que medita,

y el suelo nos sostiene,

y el aire nos detiene,

y el cielo nos contiene.

 

Bajo todo este silencio,

tan hermoso como atroz,

el contacto a la distancia

festeja la juventud,

que medita y vibra

ahora.

Que cálido pensar

No sabría si creer,

como desde un mito,

una visión inocente,

una iluminación pequeña,

el destino cobra vida

y desde ese florido lugar,

el mensaje se propague,

como el aire incontrolable

que se encuentra en los encuentros cercanos

de cualquier tipo.

 

Que cálido pensar,

que cálido pensar, bien digo,

ese poder de expectación

que vuelve sorpresa lo cotidiano,

y paralelamente una realidad

se crea y decide crearse

cuando el mal se volvió invisible.

El avistamiento

¿Te acordás del mar?

En un silencio,

mientras tras las paredes crujían los muebles,

se arrastraban los pesos,

las maderas se encariñaban,

se oían truenos,

esos estruendos que anuncian

la próxima llegada.

 

El avistamiento que siempre se huele,

como quien deja un rastro

una presencia que gravita,

en eso de los ruidos de la vida tras los muros

recordé el trueno en el mar,

como un ataque de romanticismo.

Lontananza II

A veces creo que encontrar

es la antesala al laberinto,

porque el contexto, el color, el sabor,

el olor de esos recuerdos,

forman un eléctrico cambio.


Esa corriente desata

la construcción de lo ya ajeno,

de una lejanía perpetua,

de una lontananza que se posa,

a los pies de la cama.

La consistencia

Aquel poder divino

predijo que todo lo que haríamos

se transformaría en peso,

en un proceso de gas a líquido,

de líquido a sólido.

Sólido de constancia pura de materia gris

que lento se cocina a fuego

para atravesar las partículas,

y desde el aire comenzar el habla,

la conversación.

 

Aquel poder divino

devino en sustancia,

el ritmo de la consistencia,

que con cruda elegancia,

parte el aire como un trueno

mientras a la distancia,

sos pensamiento.

Latente

Como una odisea,

como una antología,

como un viaje intergaláctico

al espacio interior,

un recorrido circular

de las ideas fundamentales,

de los pilares en el bosque,

del stonehenge mental,

que aún erosionado y en ruinas,

decide permanecer latente,

como el fuego que nunca se apaga,

si no, se calma.

Como un viaje intergaláctico,

sin salir del cuarto.

Unísono

El silencio callado

sobre el aire contenido

que se condensa en el suelo,

de todas las mañanas

que amanecen al unísono,

de estos raros movimientos nuevos.

En el frío aparece,

que acontece en la ventana,

que me abraza en la cocina,

que se filtra por la puerta,

y que refleja por toda la casa.

Son casi las diez,

y en este tiempo nunca

se sale de la cama.

Parece verano

En este falso verano

que acontece previo a la lluvia

donde el inicio debe ser

reiniciado.

En este falso verano

que es un fuego enjaulado

nos encontramos en pausa,

terminando algo que aún

no comenzamos.

Se va Marzo, salúdalo,

porque si hay algo que decir

es que todavía, no comenzamos.

Porque aún, parece verano.

miércoles

Concentrado

Concentrado

es este azul uniforme,

que vino para llamarme,

mientras en la profundidad

de las aguas estaba.

En esta inquietud

que canta eureka,

que se relame en la propia idea

sin cuestionarse tanto todo.

Concentrado

en este envase,

que la noche libera,

para pintar los rincones

y desafiar eléctricamente

a quien desee ponerse en frente.

Generar

Generar un templo

en cada espacio roto,

generar un silencio

que arrebate pensamientos.

Generar el espacio

de la contemplación en cascada

que se derrama y diluye,

entre el sol, a luz y el pavimento.

Generar las olas,

generar el sueño,

recorrer esos metros cuadrados

en quietud.

En la quietud de los pensamientos.

La torsión

La torsión,

los huesos,

las contracturas,

los sonidos del aire,

la mirada concentrada,

en este mar de alcohol en gel,

que de pronto encontramos

sin buscarlo.

De pronto nos encontramos

De pronto no nos encontramos más.


La torsión,

los huesos y la carne,

el abrazo cautivo,

y todo este fuego desperdiciando.

Contener la llama

es una contractura concentrada.

Aries

 Ponerse en acción

es cambiar la materia

es desafiar al día

tomar la luz y hacerla.

Es provocar al sol

cantarle unos versos

querer embelesarlo,

avasallando su furia,

y convertirse en piedra

en talismán humano,

para resplandecer

y ponerse en acción.

Aries,

la templanza y la firmeza,

la convivencia.

Otro color

 En este día soleado

se escucha la actividad solitaria

y la desesperación informativa.

En este día soleado

logré encontrar el sentido

mientras detrás y por acá cerca,

cantan unos pájaros indescriptibles,

imaginados.

de sonido gutural invisible.

En este día espero

que los hallazgos sean plenos,

que la luna haya dejado,

o haya renovado,

todo el vocabulario

que siempre necesitamos.

Hoy el día es de otro color

ese que viene del cielo para

renovarnos.